Además de lo que comento en el vídeo, es fundamental tener en cuenta que, al igual que cualquier otro tipo de cine, el porno es ficción. Esto significa que lo que vemos en pantalla no es un reflejo de la realidad, sino una representación idealizada o dramatizada de ciertos aspectos de la sexualidad.
Como tal, puede servirnos como una vía para explorar partes de nuestro deseo y entender más sobre nuestras fantasías.
Sin embargo, es crucial recordar que existen muchas otras maneras de explorar nuestra sexualidad, y que lo que se muestra en el porno no necesariamente se corresponde con lo que ocurre en la vida real.